Juan Gabriel Guerra Gil

Juan Gabriel Guerra Gil nace en Málaga el 9 de febrero de 1988. En 2011 se licencia en Derecho en la Universidad de Málaga y al año siguiente realiza allí un Máster en Derecho Penal y Política Criminal. Aumenta su formación y en 2016 finaliza un título de Experto en Procedimiento Administrativo y Contencioso-Administrativo. Desde 2014 se dedica profesionalmente al derecho.

Las notas biográficas que publica el Centro Andaluz de las Letras apuntan que comienza a escribir en la adolescencia: «en un primer momento escribía solo para sí mismo, pero eso cambiaría en el otoño de 2011, cuando visitó París». En esta ciudad descubre el «Club des Poètes», un café-restaurante donde se disfrutaba de la poesía, recitando poemas propios y de otros escritores, con un ambiente especial y bohemio. El joven poeta comenta: «Aquello para mí fue descubrir otro mundo. Me podía imaginar lo que sintieron Picasso o Salvador Dalí cuando quedaron maravillados por el ambiente parisino de su época. Fue un impacto. Y me quise «traer» el Club a Málaga.» (Entrevista personal, 12-VII-2021.) El descubrimiento de ese otro mundo: el de la «poesía contagiosa» le lleva a crear, cuando regresa a su ciudad natal, «La Troupe de los poetas». Lo hace junto a varios compañeros de la Facultad –Nicolás Llamas, Verónica Tejada y Silvia Guerrero–, y busca celebrar recitales de poesía en vivo una vez al mes. Así lo recuerda el propio autor:

La Troupe de los poetas es un proyecto muy efímero, que duró un par de meses. Cuando llegué a Málaga ese mes de agosto, hablé con varios de mis compañeros de carrera a los que les gustaba la poesía y la Literatura en general. Les conté lo que había vivido en París y que creía que podíamos llevar la poesía a teterías, como se estaban llevando otro tipo de iniciativas, como cuentacuentos o conciertos de cantautores.

Cuatro compañeros: dos chicas y dos chicos, nos reunimos para leer poemas de grandes autores. Rafael Alberti, Bécquer, Neruda, etc.

La tetería «El Bosque de Hadas» fue la que nos abrió las puertas. Hicimos dos eventos. A partir de ahí llegó septiembre, las recuperaciones, y se disolvió todo de forma tácita.

Actúan con bastante éxito, tal y como Javier Martínez lo indica en la revista Modernícolas. Querían «demostrar que hay un movimiento en Málaga aficionado a las letras y, concretamente, a la poesía» (nº 2, XI- 2011).

Al conocer a Kris León en 2011, en uno de sus actos poéticos de «La Troupe», Juan Gabriel Guerra se une a los integrantes de «La Rebotica», asociación cultural que se reunía en el mítico local «La Botica», fundado por Javier Moreno Castillo, Javi Botica. Participa allí leyendo sus propios versos hasta la muerte de su fundador, en 2012. Desde entonces, su nombre aparece en eventos de poesía en vivo, participando en jams en Málaga –Ática, Rooster– y en Madrid, en encuentros como «Noches con Arte», «Poesía por Favor», en actuaciones en María Pandora, Dog & Roll… Asimismo, en octubre de 2014 forma parte del espectáculo «Versos caducifolios para pasiones perennes», que se estrena en Pitres (Granada), donde sus versos se unen a las canciones de la cantautora malagueña Alba Jiménez. En junio de 2015 participa en «Versastres naturales», celebrado en Málaga, en Rooster, donde sus poemas y los de Roberto Ruiz Antúnez alternan con las canciones de Alba Jiménez e Inercia. Ese mismo año publica su libro Verxo explícito, que nace del dolor, y se muestra como una catarsis purificadora. Un libro, que concibe, en palabras del propio autor, «casi para liberarme de todo lo que había escrito ahí». Durante el año 2019 participa en los «Jueves Culturales de la ONCE» y, puntualmente, en el recital poético «Solo ellos», organizado por el Centro Andaluz de las Letras, dentro del ciclo «Escaparate Andaluz». En esta ocasión, lee sus poemas junto a los poetas Juan Gaitán, Jesús Baena Criado, Julio César Jiménez, Antonio Jesús González y Agustín Hervás.

En la actualidad, tiene escrito un segundo poemario, todavía inédito, del que se siente muy complacido por la madurez literaria que demuestra. Concluido este libro, ha seguido escribiendo y su nueva producción ha experimentado un giro «hacia una poesía o a una lírica un poco más mística y más relacionada con la naturaleza. He dejado atrás la poesía amorosa –confiesa el autor–. Será porque ya no hay cosas que duelan»; pues, como dice Rafael Lechowski: «Donde duele, inspira».